Una de las reglas más o menos escritas de los slasher es que los niños nunca mueren. Por eso, esta propuesta belga de slasher en campamento de boy scouts se sentía interesante a primera vista. La acción sigue a los Welps (Cachorros) en su campamento de fin de año que van desde Bélgica a Francia y se topan con un preciso asesino en serie especialista en trampas. Vamos a contestar rápido dos preguntas: ¿mueren niños? sí, de a montones. ¿Es buena película) no, a pesar de un buen arranque y casi que diría una hora completa en su recta final se manda cagadas tremendas, se pone a explicar cosas que ni eran necesarias de explicar y a sacarse de la manga dobles personalidades (lo mismo, mismo que mataba Haute Tension de Alexandre Aja) por lo que termina por ser una porquería sin pies ni cabeza. Un 1 de esos decepcionantes, que viene siendo un 3 hasta el adabacle final que te deja masticando amargura. Por Fito.
Nota: El título internacional es Cub.
Puntajes:
Federico:
Fito: 1
Gastón:
Leo:
Martín:
Rodrigo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario