Han pasado 8 años en Ciudad Gótica luego de los incidentes con El Joker y Harvey Dent (devenido en Dos Caras). Han sido 8 años de bonanza y tranquilidad, pero los ricos han acumulado más dinero y los pobres, descontento. Son 8 años que terminan, porque desde algún lugar recóndito del mundo llega Bane para quebrar al hombre murciélago y completar el plan que Ra´s Al Ghul dejara inconcluso 10 años atrás.Por primera vez en las entregas del director Nolan sobre el encapotado, nos encontramos con una clara secuela. Toda línea argumental de TDKR deviene o bien de Batman Begins (2005) o bien de The Dark Knight (2008), por lo cual es necesario haber visto las anteriores. Incluso, busca emular la estructura de su film anterior y allá donde un espectacular robo de payasos enmascarados nos mostraba el modus operandi del Joker, aquí es un secuestro aéreo lo que nos presenta a Bane. Y de allí en adelante, los hechos se sucederán vertiginosos.
No hay forma de poner en tela de juicio la efectividad de Nolan como director y coguionista de esta saga de Batman. Conduce la historia con emotividad y opta por matizar el relato de manera coral -no seguimos sólo a Batman, sino que Selina Kyle (a la que nunca se nombra como Gatúbela), Jim Gordon, Lucius Fox y un joven policía llamado Blake, son los narradores de toda la historia- lo que da como resultado una compleja trama, lo que se agradece. Sí puede objetársele que para ello, Batman queda algo desdibujado o reducido meramente a coprotagonista (y su visión del personaje es bastante simplota en este caso, ya que queda reducido a un tipo que pelea con ganas y que tiene un gran espíritu, pero no especialmente preparado para enfrentar enemigos más poderosos o ni siquiera un detective medianamente decente). Pero el resultado funciona, empuja la trama y cumple muy dignamente con las historias que presenta aunque para ello deba incurrir en algunos facilismos.
El reparto funciona tan bien como siempre. Christian Bale tiene poco espacio para maniobrar, pero cumple, y son los nuevos integrantes del elenco quienes más destacan. Tom Hardy como Bane está impresionante, así como Anne Hathaway como Gatúbela (para sorpresa de quien escribe). Marion Cotillard y Joseph Gordon-Levitt, destacan a su vez y los veteranos de la saga Gary Oldman y Morgan Freeman se entregan en sus roles. El Alfred de Michael Caine queda reducido a un monigote casi sin peso en la trama pero eso se compensa con un delirante cameo de Cillian Murphy como el Espantapájaros. Ideológicamente, es complicada. Bane, el malo, levanta a los pobres y desgraciados de la ciudad contra los ricos y Batman, el bueno, se para delante de ellos con un ejército de policías. El mensaje es bastante conservador y no es de extrañar las críticas de los liberales en EEUU como los mensajes entusiastas de republicanos. Pero más allá de estas interpretaciones, que Nolan anda desmintiendo en entrevistas, TDKR supone un cierre entretenido, emocionante (con momentos espectaculares como la detonación de Ciudad Gótica y esa escena en el campo de Fútbol Americano que se vio en los avances) y que, si bien sus predecesoras son mejores películas, no falla. Nolan se despide del personaje dejando el listón bien en alto. Aprendé, Schumacher. Un 3. Por Fito.
Puntajes:
Federico: 2
Fito: 3
Gastón:
Martín:
Rodrigo: 3
Promedio Tripartito: 2.66
Promedio Tripartito: 2.66
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