Torrente vuelve al cuerpo policial con el objetivo de proteger a una importante eurodiputada que es el blanco de un montón de asesinos. Al mismo tiempo, el obeso poli debe hacerse cargo de su hijo, al que acaba de conocer. Adolece de los mismos problemas que la entrega anterior pero logra salir un poco más airosa. Un 3. Por Martín.Puntajes:
Fito: 3
Gastón: 2
Martín: 3
Rodrigo:
Promedio Tripartito: 2.66
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