Primera adaptación de la serie vampírica de relatos de Sheridan Le Fanu a cargo de la mítica productora Hammer. Durante una fiesta, una condesa debe salir de urgencia (esto pasa allá por fines del 1700) pero no quiere que su hija se quede sin festichola, así que le pide al amable general que anfitriona (que no es otro que Peter Cushing) si la jovencita, Carmilla de nombre y poseedora de las infernales curvas de Ingrid Pitt, se puede quedar. El buen hombre accede y, oh casualidad, su sobrina arranca a padecer anemia... Al margen del fuerte componente lesboerótico, el film ofrece una contundente visión del mundo de los vampiros (el de Le Fanu, que tiene algunas diferencias- mínimas- con el de Bram Stocker) gracias a un guión muy sólido que no da lugar a casualidades. Los secundarios en especial juegan un importante papel en la trama. Vale un buen 4. Por Fito.
Puntajes:
Federico:
Fito: 4
Gastón:
Martín:
Rodrigo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario