Jeremy Irons es un diplomático francés (!) en la convulsionada China de la década del sesenta (del pasado siglo) que comete el error de enamorarse de una cantante de Ópera. A partir de ese momento, la película se envuelve en un asunto sórdido, que por momentos pierde todo interés y que mezcla espionaje, sexo, marchas maoistas y un juicio estúpido seguido de una aún más estúpida escena de sexo. Descarrila hacia el 2 y no llega al 1 porque termina a tiempo. Pálido 2. Por Martín.
Puntajes:
Federico:
Fito:
Gastón:
Martín: 2
Rodrigo: 2
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