Policial negro y espionaje se dan la mano en esta colosal película "de
Welles", que le fue vilmente robada por el productor, quien se adjudicó
el "infame corte final", según la prensa. A mí, personalmente, la película tal cual está me funciona muy bien. El siniestro millonario Gregory Arkadin contrata a un desencantado capitán de barco y aventurero (Robert Arden) para que investigue su propio pasado -el de Arkadin- antes del año 1927, adjudicándose una suerte de extraña amnesia que afecta su recuerdo de aquellos tiempos. Con un ritmo avasallante (vamos de Inglaterra a México y de allí a España, Checoslovaquia
y Francia), el filme es un tour de force de los que acostumbraba
encarar Welles que nos hace preguntar cómo pudo haber sido el final si
él efectivamente hubiera controlado todo el producto. Un 5. Por Martín.
Puntajes:
Federico:
Fito:
Gastón:
Martín: 5
Rodrigo:
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