Tom Hanks, Julia Roberts, Philip Seymour Hoffman y Amy Adams (cada vez me gusta más). Con esos nombres nada puede salir mal. Hay buenas actuaciones aseguradas. Charlie Wilson es un congresista que tuvo la visión (o como se llame) de apoyar a los afganos en su lucha contra la invasión soviética, destinando miles de millones de dólares para ello. Lo bueno de la película reside en su peso actoral y en su pulso narrativo, nada que reprochar acá. Lo que si puede molestar a más de uno es su falta de juicio moral y ético a los sucesos que ocurren y su demonización de las tropas soviéticas en contraposición de la desinteresada asistencia de algunos americanos. Hay que apuntar, sin embargo, que la película se distancia tanto de lo moral, que uno puede verla como quiera, como algo proyanqui o como una pieza con ánimo de denuncia. Despojándome de la cuestión política, me animo a darle un 4. Por Gastón.
Puntajes:
Federico:
Fito:
Gastón: 4
Martín: 3
Rodrigo:
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