Christopher Lambert (en aquellas épocas donde era una estrella de cine y no un invitado más de los desfiles de Roberto Giordano en Punta del Este) da vida a un ejecutivo americano quien, de trabajo en Japón, terminá en el medio de una guerra ancestral entre un clan Ninja y una familia Samurai. La historia le hace honor a su nombre (y no en vano en Uruguay la estrenaron bajo el título de "Perseguido") y el amigo Lambert las pasa bastante canutas escapando como puede de los implacables ninjas. Tiene un buen villano en John Lone (hombre que suele rendir), el propio Lambert no desentona (reducido casi que a ser un comic relief) pero quien se roba la película es Yoshio Harada como el Samurai Takeda (en particular en una sangrienta escena a bordo del mítico tren bala). El final es algo inverosimil y poco a tono de una historia mejor que se venía narrando, lo que le saca el 4 y la deja en un 3 sólido, igual, de los recomendables. Por Fito.
Puntajes:
Federico:
Fito: 3
Gastón:
Martín:
Rodrigo:
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