En la cuarta temporada de BREAKING BAD se prepara la explosión (que llega en los capítulos finales) de la gran olla de mierda que cocinan -digamos que literalmente- Walter White (demencial Bryan Cranston) y Jesse Pinkman (Aaron Paul). El imperio de la metanfetamina, que lidera el siniestro Gustavo Fring (un Giancarlo Esposito que ofrece la mejor actuación de esta temporada de la serie) en Nuevo México choca con los intereses del Cartel mexicano. Los trece capítulos de la temporada narran, desde diferentes ópticas, esa lucha al tiempo que avanzan en la relación White-Pinkman y de los demás protagonistas, a saber, el agente de la DEA Hank Schrader, su esposa Marie, etc. Los tres últimos capítulos son auténticas bombas de relojería que manejan a la perfección la tensión, y cuando parece que todo termina, que ya está cerrado, que el universo que Vince Gilligan y su equipo han venido construyendo durante cuatro temporadas (en 46 capítulos) ha llegado a su fin, se introduce un elemento nuevo que todo lo altera y que desencadenará en la quinta temporada (la última de la serie, que en estos momentos se filma y que se estrenará sobre finales de este año). Solidísimo 4. Por Martín.
Puntajes:
Federico: 5
Fito:
Gastón: 4
Martín: 4
Rodrigo: 4
Promedio Tripartito: 4.25
Promedio Tripartito: 4.25
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