Coogan (un joven Clint Eastwood) es un tan díscolo como lacónico alguacil de Arizona que se ve obligado a viajar a New York para extraditar a un preso. Más allá de esta historia en sí, que es un policial simple con trazas de humor, la película gira más sobre la personalidad de Coogan: conservador, machista, duro, el paradigma durante mucho tiempo de cualquier personaje de Eastwood. Con todo y algún momento efectivo, el guión es bastante flojo y la historia tiene sus no pocas tonterías. Con esta y la reseñada hace poco Madigan, descubro un Siegel bastante chauchón y la prueba de que tener una carrera sin manchas es harto difícil. Un 2. Por Fito.
Puntajes:
Federico:
Fito: 2
Gastón:
Martín:
Rodrigo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario