El Padre De Gardel de Ricardo Casas (2014)

¿Uruguayo? ¿Argentino? ¿Francés? La eterna discusión sobre la nacionalidad de Carlos Gardel no ocupa lugar en el documental de Casas, que asume de inmediato el natalicio del cantante en Tacuarembó y a otra cosa. Como su nombre lo indica, esta es la historia de su padre, el Coronel Carlos Escayola, su ascenso y su caída.

El punto de inicio elegido para esta historia es el año 1838, cuando dos hermanos Escayola, miembros de una pudiente familia catalana, viajan a Uruguay en busca de oportunidades y terminan instalándose en Durazno. Uno de ellos no tardará en vincularse con Andrés Latorre y su hijo, Carlos, terminará oficiándole de escribiente a Venancio Flores. Así comienza la azarosa vida de Carlos Escayola, un hombre que en sí mismo y como nos lo pinta la película, será un representante de este siglo (19) y en sí mismo una manera de retratar la vida en el interior del país, particularmente la zona de Tacuarembó donde se instalaría desde edad muy temprana.

Porque la película de Casas es afortunadamente ambiciosa, y siguiendo el periplo de Escayola- quien no tarda en aliarse políticamente con el Partido Colorado y termina por transformarse en el hombre fuerte del dictador Máximo Santos al norte del Río Negro- se sigue también los avatares del Uruguay durante estos años. Escayola, quien pronto es nombrado Coronal en designación directa por el propio Santos, oficia casi que de señor feudal en la zona de Tacuarembó.

Una personalidad muy contradictoria, se le conocen actos despóticos de primera mano a Escayola (así como asesinatos, apropiaciones, fraudes, etc.) al tiempo que es el fundador de uno de los primeros teatros del país y que en su época le disputaba al porteño Teatro Colón las mejores zarzuelas y óperas Un hombre que tenía su propio torreón con grilletes para sus opositores políticos (muy a la usanza de su amigo Santos) pero que era un conocido melómano, practicante de piano, guitarra, flauta, recitador de versos, director de un conjunto de carnaval y un variado etcétera.

La figura de Escayola se asocia directamente a la historia de Tacuarembó. Y su vida familiar es el núcleo del documental. Una vida familiar tan peculiar como puede ser la de un hombre que se casó con tres hermanas de la misma familia y con las que tuvo hijos de manera cruzada incluso antes de casarse con la que correspondía. La vida familiar de un hombre al que se le cuentan no menos de 50 hijos naturales desperdigados por toda la zona.

La vida de Escayola se construye a partir de testimonios varios. Primero, los de su propia familia y descendencia, compuesta por sobrinos, nietos, sobrinos nietos, bisnietos e incluso una tataranieta. A estos testimonios más emotivos si se quiere, se complementan los de historiadores y sociólogos que marcan la data fría en el traspaso entre el Uruguay bárbaro y el disciplinado según la teoría del historiador Barrán. Como voz narradora de todo el documental, se alternan tres protagonistas de lujo: los escritores tacuaremboenses Tomás de Mattos, Washington Benavídez (estos dos en una entretenida charla de entrecasa, mate de por medio) y Susana Cabrera, autora del libro "Los secretos del Coronel", quien es en cierta medida el nexo en materia de continuidad de todo lo que se cuenta. Estos testimonios se alternan con completa naturalidad y soportados por abundante material de archivo- que no escapa a películas que reconstruyen ciertos momentos históricos o fotografías- en un ritmo entretenido y muy ágil.

¿Y Gardel? Pues aparece promediando el documental y con él, algunas anécdotas se vuelven difusas o polémicas (fiel a la costumbre que rodea al cantante) tales como un encuentro con su padre el Coronel que terminó en disparos o el escándalo que significó su nacimiento, si es que fue producto de un incesto o no. Pero aunque parece amenazar hacerlo por un momento, no es Gardel el centro de esta historia, sino su padre, Carlos Escayola. Y así como se contó su ascenso, se cuenta su caída, que se condice con el cierre de las minas de Cuñapirú en el norte. Su pobreza en la vejez, su mudanza a Montevideo, la soledad de sus últimos días.

Con el retrato de Escayola como centro, Casas nos cuenta un pedazo de la historia nacional, la vida prototípica de una familia del siglo 19, del progreso y decadencia del interior del país. Cuenta una compleja trama y sale bien librado en todas sus puntas. Y al mismo tiempo, entretiene.

Unas palabras sobre la exhibición de esta película. Su producción cuenta con el apoyo del ICAU y de Montevideo Desarrolla, por lo que cabe intuir que existe un interés en su exhibición. Cómo puede lograrse esto estando la película en un único horario (17:45) tan sólo en dos salas capitalinas, es un misterio aún más grande de lo que fue la nacionalidad de Gardel durante años. Sólido 3. Por Fito.

Puntajes:

Federico:

Fito: 3

Gastón:

Leo:

Martín:

Rodrigo:

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