Cat On A Hot Tin Roof de Richard Brooks (1958)
Es una calurosíma tarde en el cumpleaños 65 de Big Daddy. La familia se ha reunido como hacía mucho que no pasaba, pero no es por intenciones de celebrar el onomastico, sino que Big Daddy está regresando de unos estudios que aparentan haber diagnosticado un cáncer definitivo y la torta de Big Daddy es enorme y todos quieren el pedazo más grande. Tenso drama familiar nacido de la pluma del genial Tennessee Williams y adaptado a la pantalla por el mismo Brooks. La tarde avanza y la cosa sólo se complica, se complica y se complica. La pareja protagónica está muy bien (Elizabeth Taylor y Paul Newman) y hay un buen elenco secundario (donde destaca Madeleine Sherwood en un personaje sinceramente odioso) pero es el gran (literalmente) Burl Ives quien se roba todos los aplausos con el complejo, gigante, Big Daddy. Un 5 señores. Por Fito.
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