Separate Tables de Delbert Mann (1958)
Pequeñas historias se combinan en un hotel de la costa británica durante la post guerra. Está la pareja de estudiantes enamorados que dudan en casarse (Rod Taylor y Audrey Dalton), está la vieja solterona solitaria que vive sólo para apostar a los caballos (May Hallat) pero hay también historias un poco más definitivas como ser el triangulo amoroso que se produce entre la dueña del hotel y dos inquilinos (la estupenda Wendy Hiller, el siempre rendidor Burt Lancaster y la tan hermosa como petrea Rita Hayworth) o como el romance platónico entre un mayor que bien puede ser un fraude y una jovencita reprimida (David Niven, genial y Deborah Kerr, maravillosa). Mann nos propone pequeños estallidos dentro de una historia filmada con mucha clase y calma, donde todos tienen su momento y el filme, sin apuro y sin pausas, va alcanzando tranquilamente el 4. Por Fito.
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Fito: 4
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