Un drama duro sobre uno de los tantos nuevos problemas que los padres de este siglo tienen que enfrentar con el cuidado y la crianza de sus hijos. Una preciosa, realmente preciosa niña preadolescente en Chicago, que acaba de cumplir 14 años tiene un “amigo” por chat que dice ser de California, que poco a poco se va transformando en una suerte de “noviecito” de internet. El problema aparece cuando el muchacho ni es quien dice ser, ni mucho menos es lo que dice ser. Clive Owen y Catherine Keener son los padres de Liana Liberato, la niña; y el planteamiento es duro de manejar porque saca que quicio a cualquiera y enfurece al más calmado. Sirve como reflexión y como un importante llamado de atención hacia las actividades de nuestros hijos y hacia ese delicado balance entre dejarlos experimentar y ser, en definitiva; y al mismo tiempo nunca dejar de prestar atención ni de vigilar de cerca lo que les sucede. Como película tiene momentos sólidos y resuelve bastante decentemente. Sólido 4. Por Rodrigo.
Puntajes:
Federico:
Fito:
Gastón: 5
Martín:
Rodrigo: 4
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