Cuidada reconstrucción histórica sobre el sitio de Leningrado (que se prolongó entre 1941 y 1944, dejando un saldo de 1.2 millones de muertos, sólo contando población civil) que cuenta con buen ritmo y una notoria producción. Al tremendo drama evidente de lo que acontece en la ciudad se le suma (desafortunadamente, ya que es una trama que distrae y poco aporta) el conflicto de una reportera británica (Mira Sorvino, en una desacertada elección de casting) que queda de rebote en la ciudad. Los mejores personajes los brindan las desconocidas Olga Sutulova en la piel de una convencida comisario política y Luiza Mosendz como una soprano que queda sosteniendo el último teatro en pie. Gabriel Byrne y Armin Mueller-Stahl ponen lo suyo en dos secundarios de relativo peso. Un 4, al que llega tambaleante luego de unos imponentes 20 minutos iniciales y un devenir que va de más a menos durante todo su metraje. Por Fito.
Puntajes:
Federico:
Fito: 4
Gastón:
Martín:
Rodrigo:
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