Un western pero hecho en clave de Mission Impossible o de las últimas versiones de James Bond. Will Smith y Kevin Kline son dos agentes de la ley que andan intentando detener a Kenneth Branagh de que complete su plan y se apodere de Estados Unidos. Salma Hayek es la damisela en apuros y si bien no le falta ni acción, ni comedia, ni aventuras; al final del día se pasa de tontona por momentos. Parece casi una producción de Disney, y si bien no le va a cambiar la vida a nadie, alcanza a entretener. Apenas 3. Por Rodrigo.
Puntajes:
Federico: 3
Fito:
Gastón:
Martín: 2
Rodrigo: 3
Promedio Tripartito: 2.66
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