En un futuro no establecido, gran parte del sistema solar ha sido colonizado por los humanos. Justo al lado de una de las lunas de Júpiter, Io para ser precisos, hay una gigantesca estación espacial dedicada a la minería principalmente. En este ambiente, un marshall recien asignado al su puesto, interpretado muy sobriamente por Sean Connery, le presta atención a un par de muertes que se suceden en circunstancias extrañas. Un joven Peter Boyle compone un muy buen secundario también. En este ambiente espacial futurista, Hyams nos plantea un policial derecho, bien filmado y bien resuelto, lo suficiente para llegar al 4. Por Rodrigo.
Puntajes:
Federico:
Fito: 4
Gastón:
Martín:
Rodrigo: 4
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